2/10/2010

Tlaxcala, el estado natal de Beatriz Paredes, se convertirá en el estado 19 en criminalizar a las mujeres por decidir sobre su maternidad

Cuando Beatriz Paredes asumió el gobierno de Tlaxcala (1987-1992) propició reformas al Código Penal para ampliar las causales de no punibilidad del aborto en su estado natal. Hoy, siendo presidenta del Partido Revolucionario Institucional, ha solapado y permitido que su partido, en 17 estados del país, promueva leyes que penalizan a las mujeres por decidir sobre su maternidad, criminalizando la práctica del aborto, aún en casos de violación. Tlaxcala esta por convertirse en el Estado 19 y nuevamente presenciaremos el silencio cómplice de Beatriz Paredes.

En promedio, 10 gobernadores y más de 300 legisladores del PRI han promovido y votado estas leyes, sin que hasta ahora alguno de ellos, a solicitud de su Presidenta, tenga que rendir cuentas ante la Comisión Nacional de Justicia Partidaria, el órgano encargado de la vigilancia y cumplimiento de los estatutos de ese partido. Las reformas que se han aprobado en 17 estados del país para criminalizar a las mujeres, obedecen a la agenda del Vaticano y forman parte de los documentos básicos del Partido Acción Nacional desde hace décadas, no así del Partido Revolucionario Institucional. Privilegiar “la vida desde el momento de la concepción y hasta la muerte natural” para perseguir y criminalizar a las mujeres que deciden, como último recurso, interrumpir un embarazo, es por decir lo menos, incongruente y contradictorio con lo que se establece en los principios y estatutos de un partido que se define como socialdemócrata.

A la ciudadanía nos queda claro que lo que defiende Beatriz Paredes dentro de las filas del PRI no es un proceso democrático donde cada legislador vota “por convicción” la defensa de la vida en gestación sobre los derechos de las mujeres; lo que anima el voto de los priistas es la impunidad. La impunidad es lo que ha hecho de Ciudad Juárez la ciudad más insegura del mundo. La impunidad es lo que convierte a nuestro país, día con día, en uno de los países más retrógrados en materia de derechos, libertades y acceso a la justicia para las mujeres.

Elsa Conde
Grupo Derecho a Decidir